Usted está aquí

El Fruto del Esfuerzo

El martes 12 de diciembre más de setenta alumnos del Centro de Formación Profesional recibieron sus diplomas, cerrando una etapa con resultados muy positivos.

Con la llegada de diciembre, el Centro de Formación Profesional de la LBV se vistió de fiesta para homenajear a los setenta y tres alumnos que finalizaron los cursos de Gastronomía y Organización de Eventos, realizados durante el año. 

Jéssica Domingues

Alumnos del Centro de Formación Profesional de la LBV recibieron su certificado de finalización de curso.

El martes 12, con una sencilla y cálida ceremonia, cada uno de los alumnos, acompañados por familiares y amigos, recibió el certificado que acredita el cierre de esta etapa. 

Jéssica Domingues

Alumnos del Centro de Formación Profesional de la LBV recibieron su certificado de finalización de curso.

El acto contó con las palabras de apertura del Representante Residente de la LBV en Argentina, Edson Teixeira, quien felicitó a todos por sus logros, remarcando la importancia de haber creído en sus propias capacidades para alcanzar una meta soñada. Seguidamente, las Profesoras Oqui Muro, Sandra Strajch, Silvia Tejero, Miriam Ambrocio y Bettina Lorenzo, a cargo de los cursos de Cocina, Pastelería, Decoración de Tortas y Organización de Eventos, hicieron entrega de los certificados, dirigiendo a sus alumnos gratificantes palabras que cada uno, sin duda, guardará en su corazón. 

El momento emotivo de la tarde se vivió al cierre de la ceremonia, cuando el joven André Luiz Franchi interpretó un hermoso tema de música legionaria, invitando a todos a unirse, por un mundo mejor:  "(...) llevando el Amor a toda la Humanidad. Juntar nuestras manos, vibrando en un corazón, ¡porque somos todos hermanos! (...)". 

El salón decorado con los típidos birretes de egresados, una mesa con una deliciosa torta, souvenirs bellamente elaborados por los alumnos, y sabrosos platos preparados por los flamantes cocineros y pasteleros, dieron cuenta de que todo lo aprendido ya forma parte de las vidas de estas setenta y tres personas que encontraron en la LBV un espacio de aprendizaje, creatividad, amistad y alegría.