¡Comenzaron las Clases!

Leilla Tonin

Con la llegada del mes de febrero las calles de la ciudad comenzaron a poblarse de miles de niños con sus uniformes, dispuestos a aprender y disfrutar junto a sus compañeros. Para muchos, es el comienzo de un camino de nuevos conocimientos, juegos y amistad. Sin embargo, muchos otros pequeños no cuentan con esta posibilidad. En Paraguay, 40% de los menores de 10 años se encuentran entre la pobreza en sus múltiples dimensiones (algo que va más allá de los ingresos). Muchos no tienen acceso a niveles mínimos de nutrición, educación y salud. (Fuente: Observatorio Económico UCA, 2017)

Pero felizmente, para los 100 niños que asisten al Jardín de Infantes y Preescolar José de Paiva se abre un mundo de oportunidades en un espacio que los contiene y contribuye a su desarrollo, con alimentación, actividades pedagógicas, recreativas, y principalmente, el afecto de todo el equipo educativo. Esto, sin duda, repercutirá en sus vidas.

Leilla Tonin

Este año, en el Jardín de Infantes y Preescolar José de Paiva Netto ubicado en la calle José Asunción Flores Nº 3438 atiende a 100 niños de entre 2 y 5 años, ellos realizarán actividades artísticas, como talleres de expresión corporal, música y narración. También podrán participar de talleres, juegos y recreación, entre muchas otras propuestas.

Leilla Tonin

Los niños que asisten a la LBV, en doble jornada, provienen de hogares que se encuentran en situación de vulnerabilidad social. La escuela es para las familias mucho más que el espacio de aprendizaje de sus hijos, pues además ofrecen contención y asesoramiento en las diversas problemáticas que enfrentan, y pueden asistir a talleres sobre temas como violencia, límites, alimentación, derechos humanos, entre otros. Es más, todas las actividades se desarrollan teniendo en cuenta a las familias. 

Leilla Tonin

Pedagogia

Cabe destacar que en toda su red de enseñanza y programas socioeducativos, la LBV aplica una pedagogía propia creada por el educador José de Paiva Netto, Presidente de la Institución. Este sistema de enseñanza, en el cual el cerebro y el corazón trabajan juntos, considera al estudiante como un ser espíritu - biopsicosocial, pues trae consigo el registro de experiencias que contribuyen a su aprendizaje.

Leilla Tonin

Este marco conceptual se adapta y varía de acuerdo a las edades de los alumnos, recibiendo la denominación de Pedagogía del Afecto para chicos de 0 a 10 diez años. En esta franja etaria se procura la unión de los sentimientos al desarrollo de la inteligencia, a fin de que el cariño esté presente en todos los ambientes de convivencia de los niños, inclusive el escolar. A partir de los 11 años, se aplica la Pedagogía del Ciudadano Ecuménico, en la que el alumno, la familia y los educadores son considerados como coautores del aprendizaje, dividiendo entre sí las responsabilidades y actuando de forma distinta en un proceso integrado.